Todos hemos leído algún libro o visto alguna película dónde sus personajes eran transportados instantáneamente de un lugar a otro como por arte de magia.
Este fenómeno, conocido como teletransportación, era considerado ciencia ficción hasta que en 1993 se convirtió en una teoría científica al confirmarse la posibilidad de teletransportar un objeto siempre y cuando el objeto teletransportado deje de existir en su posición original para estar únicamente en su nueva posición.
Pero, ¿cómo es posible?
En realidad no se transfieren las partículas mismas, sino que se copian los «estados cuánticos», es decir, la información que permite «reconstruirlas» casi instantáneamente en otro lado.
En la actualidad se están realizando avances muy importantes a pesar de que una vez más la opinión científica se encuentra dividida. ¿Será posible en el «futuro» el transporte de seres vivos? ¿Qué planteamientos morales conllevará su práctica?